Vilma Ramia:

Vilma Ramia:

El Ateneo resurge de las cenizas, es como la historia del Ave Fénix

Por: Inés Muñoz Aguirre

La amplia escalera del nuevo Ateneo de Caracas nos conduce al encuentro con Vilma  Ramia, la conductora, la directora, la prestidigitadora, la gerente; la mujer que le ha tocado reconducir el destino de una institución que contra viento y marea ha celebrado sus 80 años de existencia. La amplitud de los escalones que van trazando la ruta de un casi caracol soportan con firmeza nuestros pasos.  Así eran esas grandes construcciones emblemáticas que se hacían en nuestro país. Así tienen que ser los espacios que alberguen los sueños para que estos se hagan realidad. La luz baña el segundo piso de una casa que cedida en comodato se convirtió en la tabla de salvación, cuando el equipo sobreviviente se vio en la calle cargados de cajas sin saber a donde ir.

_El Ateneo ha celebrado sus ochenta años, este año que está por concluir. Nada fáciles estos dos últimos años

_Este ha sido un proceso largo y difícil. Cinco años antes nos quitaron el subsidio y mantener el edificio de ciento y pico de empleados y de ocho pisos, era realmente una proeza. A partir del ataque de La Piedrita comienza una historia bastante oscura y llena de emociones muy fuertes. De conversaciones y conversaciones y conversaciones que considerábamos la vía para llegar a acuerdos que se convertían en un imposible. Así se produce la toma progresiva, la tensión que se produjo con los empleados. Ver como se iba tumbando todo internamente porque ese edificio no fue construido para una universidad. Todo fue muy difícil y para los que quedamos aquí fue especialmente duro, porque fuimos los que resistimos y estuvimos ahí en las malas, en las malas y en las malas y había que plantearse y ahora pa’lante, porque no era fácil resistir. Lo último que recogimos fue la librería y el Ateneo no tenía donde ir con un cúmulo de cajas llenas en ese momento de 78 años de historia. Tuvimos que conseguir varios depósitos, pero también era la historia, los sentimientos entremezclados entre lo que se quedaba en el edificio y lo que se iba con nosotros.

_ ¿Cuando ya se encontraron en la acera del frente, qué fue lo primero que se plantearon?

_¿Y ahora que hacemos? Tenemos que salir para adelante. No había otro pensamiento durante las 24 horas del día. Así entramos en esta casa que tenía tiempo sin habitar y la cual hubo que recuperar mientras imaginábamos lo que podía ser cada espacio, repensar un nuevo Ateneo que significaba un cambio que tenía que ver con desde donde está ubicada esta casa y que también tenía que ver con la vuelta a los orígenes, porque antes del edificio el Ateneo vivió en cinco casas.

_¿Tu crees que las historias son circulares?

_Puede ser. Los destinos se van encontrando. Hay circunstancias que te van llevando a construir ciertas historias, además depende de lo que hagamos y de lo que no hagamos, así como también tiene que ver la gente con que te encuentras pero sí, la serpiente se muerde la cola, siempre es como un comenzar, como cíclico. Por eso llegamos de nuevo al punto en que había que tener la creatividad a millón y la importancia de diseñar una vida para este Ateneo

_ ¿Como se manejó y se maneja la carga emocional?

_Creativamente y con un compromiso con la historia; un compromiso con la obra de María Teresa; porque todos los que quedamos aquí o la gran mayoría nos formamos en el Ateneo y tuvimos la suerte de asumir esa mística que todas las presidentas del Ateneo llevaron adelante pero que quizá María Teresa lo hizo de una manera muy especial. Además había que echar para adelante o echar para adelante, quiero decir con esto que no había para donde agarrar. Conscientes de que el Ateneo pasó por una dictadura y por momentos sumamente difíciles.

_ La historia del Ateneo está ligada al espíritu de rebeldía que siempre tiene el creador…

_Si. La Naturaleza del Ateneo es la lucha, la fortaleza, la confrontación; el encuentro de los artistas, la creatividad; porque además su historia nace en una clandestinidad y siempre ha estado conectado no sólo con los intelectuales, sino con el pensamiento y con la política. Los políticos siempre tomaron al Ateneo como su casa. Tan es así que el ataque de La Piedrita se produce cuando el Grupo Bandera Roja estaba celebrando su aniversario en la sala de arte y ensayo Margot Benacerraf. Todos los políticos de todas las tendencias siempre vieron en el Ateneo su tribuna.

UN NUEVO ESPACIO: UNA NUEVA VIDA

Esta mujer que está reflejada en  el espejo y que a veces da la sensación de jugar a la economía de las palabras,  ha hecho de la cultura su pasión y su razón de ser. Con la firmeza de las pasiones que se cultivan todos los días, en los estudios porque Vilma Ramia es una gerente cultural que Estudió Arte en la Universidad Central de Venezuela y se graduó en la mención promoción cultural.  Pequeña, con la pollina que cae sobre sus cejas enmarcándole el rostro, juega a convertir los nervios en inquietud, repite sus gestos y se ríe a carcajadas cuando una pregunta pareciera estar fuera de control, sin embargo nada se encuentra al margen del contexto donde tiene que estar y eso es lo que le permite definir las actividades de la casa o ampliar los horizontes como le ha tocado con la tradicional Feria Navideña del Ateneo que cada vez se hace más grande.

_¿Qué decidiste mantener contigo y con el equipo para sembrar unas nuevas bases?

_Había que tomar en cuenta la historia del Ateneo, la mística; que este espacio se convirtiera en un espacio de encuentro de los artistas. De hecho, la casa tiene una energía que es como de mucha tranquilidad. Te olvidas del caos de la ciudad y todo el que llega aquí logra como que comunicarse mejor, los eventos artísticos son más íntimos y se da esa cercanía entre el público y el artista

_¿En la sorpresa del día a día cuales fueron los primeros obstáculos a vencer?

_Como de la nada, salir adelante. Te encuentras así con cosas concretas como que no estamos en un lugar céntrico, que hay una nómina que mantener; pero para mi lo mejor ha sido el comportamiento de los artistas quienes aun sabiendo que al estar aquí no van a tener una ganancia económica ves la solidaridad y el apoyo. Nos reunimos aquí los que sentimos esa pasión por el arte y por seguir adelante

_¿Gerencialmente cuales son tus retos y como te los planteas?

_Los grandes retos tienen que ver con objetivos como la Feria de Navidad que ha ido creciendo exponencialmente desde que salimos del edificio. Este año está en un terreno que colinda con la Plaza Altamira Sur. Por otra parte hay una programación fuera de sede. Ojala consiguiéramos un espacio tan grande donde no perdiéramos económicamente, porque siempre hay que buscar otros lugares si queremos hacer espectáculos más grandes. Ahora realmente estamos como los gitanos porque si no lo podemos hacer en la casa,  vamos a otros espacios donde lo podemos hacer. Lo ideal sin duda sería una sede propia, en un lugar céntrico, de fácil acceso para todo el mundo. El gran reto es que el Ateneo se convierta otra vez en el gran lugar de encuentro donde los artistas y el publico puedan encontrarse nuevamente de una manera fraternal.

_¿Del pasado que rescatarías de forma especifica?

_Yo creo que el Festival Internacional de Teatro, los Festivales de música latinoamericana que fueron festivales maravillosos, ferias del libro en espacios abiertos. El proyecto Escuela que se desarrolló de una manera tan bonita en el edificio, la parte de docencia; el Festival Porte Acero; porque de allí surgieron muchos grupos teatrales, actores, directores.

_¿Cual es tu visión de la política cultural en el país?

_En la parte oficial siento que se ha estancado mucho, está muy sesgada, en las artes visuales, el cine y la parte musical han tenido más apoyo, pero el sector teatral, el de artes visuales; y el de la literatura digamos que son de los más sesgados. Falta más libertad creativa. Sin embargo los artistas que no han querido entrar por ese aro, han propiciado el surgimiento de nuevos espacios, que no serán los grandes museos pero que son espacios alternativos como Los Galpones; La Hacienda La Trinidad, la ONG de Nelson Garrido; La Carnicería de Roberto Mata. Es como el agua que aunque tu le pongas piedras y obstáculos, pasa de todas maneras.

_ Si en este momento se te diera la oportunidad de crear e implementar un plan cultural para el país. ¿Cuáles serían tus primeras acciones?

_ Es una pregunta muy difícil, pero por supuesto pienso que los museos tienen que tomar lo que habían conquistado, salvaguardar las obras en cada espacio que le corresponde. Es un área que me duele porque creo que ha sido muy afectada. Creo que hay que apoyar mucho la formación, no solamente en las escuelas de arte, en los barrios, en el interior del país y haría un trabajo con la cultura en las cárceles, porque está comprobado que el arte sensibiliza y humaniza. Hay que extender el trabajo que ha hecho el maestro Abreu, crear núcleos con el teatro, la pintura.  El tema de los presos me preocupa mucho. El arte transforma positivamente a las personas con problemas. En los barrios hay que hacer núcleos culturales completos. Eso ayudaría a combatir la violencia. Hay que construir infraestructura en todo el país, museos y teatros. Las ciudades deben ser convertidas en museos. Que en los espacios abiertos del país los artistas puedan mostrar su trabajo.

MUJER E INSTITUCION

La carrera de actriz construida bajo la guía de directores  como Enrique Porte, Costa Palamides;  Rodolfo Santana o Armando Gota.  El haber formado parte de actividades tan importantes como el Primer Seminario de Promoción Cultural y Comunicación Alternativa de Venezuela (1981), la asesoría  del Plan Cultural Centro de Desarrollo Integral en Catia La Mar (1982-1984), haber coordinado y dirigido la Galería Los Espacios Cálidos del Ateneo de Caracas, haber fundado los Espacios Unión, y haber acumulado más experiencia con la Coordinación General de los Eventos Especiales del XIV Festival Internacional de Teatro de Caracas, le han curtido la piel lo suficiente como para ser capaz de ver la luz siempre en el horizonte que bordea todos sus emprendimientos. No hay tiempo para la decepción ni para amarrarse al dolor.  Cada minuto se atesora para la búsqueda de alternativas, de nuevas propuestas y de salidas.

_¿En toda esta experiencia que sientes que ganaste?

_Me cuesta hablar en singular, yo prefiero hablar porque se trata del Ateneo en plural. Ganamos fortaleza, ganamos valentía, ganamos creatividad, aprendimos a no dejarnos vencer, a resurgir de las cenizas, a estar cada vez más unidos. Los que estamos en esta casa tenemos una convivencia mucho más linda, mas unida, mas solidaria. Yo creo que pasando la página de lo horrible de la experiencia y que ahora es todo mas difícil habría que decir que ahora todo es más positivo. Es hermosamente difícil porque se que vamos a ir para adelante

_¿Y en cuanto a valores…?

_ Más bien yo pienso que ganamos valores, esta ha sido una experiencia enriquecedora. Cada logro, cada paso, es valorado por todos.

_ ¿Cómo se testimonia la nueva historia que se ha iniciado?

_ Llevamos registrados todos los eventos que hemos hecho. El Ateneo tiene un libro que editó Maria Elena Ascanio, es hasta 1989. Por supuesto pensamos testimoniar todo desde 1990 hasta ahora. Son veinte años de una nueva historia

_ ¿ Con esta responsabilidad a cuestas, qué piensas cuando te levantas?

_ Todo va a salir bien.

_ ¿En que te basas?  ¿Qué te soporta?

_En las ganas que tenemos de hacer cosas. El espíritu que reina entre todos los que estamos aquí. Esto es como enseñar a caminar a un niño, es todo un proceso en el que encuentras muchos obstáculos pero siempre los vencemos.

_ ¿Porque te entregas a esto?

_Porque es mi vida.

_El arte ligado a la gerencia…

_Siempre ha sido así, desde mis estudios en la universidad, todo ha ido de la mano la parte artística y la gerencia. Si eres gerente sin la sensibilidad de lo que es el artista y si el artista desconoce el trabajo de producción no funciona. Lo ideal es que haya una compenetración de ambas. Para mi lo bueno ha sido que siempre me ha tocado estar al frente pero también estar detrás. Eso te da la visión de cómo quieren que te traten, delante y detrás de las cámaras y del telón. Por supuesto es una visión que tiene que ver conmigo, con mi sensibilidad, yo vibro al promocionar algo, al crear un proyecto o cuando estoy creando un personaje.

_ ¿En esta historia de tu vida tan amarrada a la institución me gustaría saber, si te pidiera que escribieras sobre el Ateneo a que le darías el protagonismo?

_ A las mujeres, porque siempre ha tenido presidentas mujeres. Siempre ha habido muchas mujeres trabajando. Mujeres emprendedoras, luchadoras y con sensibilidad artística. Ellas sacaron adelante a la institución.

_¿Si te pidiera que pintaras un cuadro que nos hablara del Ateneo que pintarías?

_ Aquí están todas las artes.  Por asociación pintaría un árbol centenario de estos que nos rodean aquí en la casa.

_ ¿Y si le tuvieras que cantar?

_ Invitaría a que lo hicieran

_¿A quienes?

_A Ruben Blades, Gal Costa, María Bethania. Vendría Pablo Milanes, Gardel, tantos músicos maravillosos del ayer y del hoy

_¿Cuándo te paras y miras hacia atrás has dejado muchos lagrimas en el camino?

_Si, bastantes. Sobre todo lagrimas por dentro. De otra manera esto no habría ido para adelante.

_¿Crees que huido quien pensó que el Ateneo iba a desaparecer?

_ Si, pero El Ateneo no es un edificio, el Ateneo es el alma.